¿N30? Eso le pregunté a Maite Montecatine nada más conocer su proyecto hace unos meses. Esta arquitecta sevillana, no ha dejado los planos, pero sus manos ya dibujan otras cosas: turbantes, sombreros, pamelas e incluso las caras de sus clientas. Si sabéis de diseño, en muchos programas (incluido el Autocad) el N30 es el color naranja, como su pelo, su personalidad, como Maite. Y así nace una marca, un concepto de diseño de sombrerería original y muy diferente hecho 100% a mano.
Tras licenciarse en arquitectura y pasar una temporada viviendo en Rotterdam, volvió a Sevilla con la mente renovada y las ideas muy claras, quería trabajar en algo que la tuviera motivada a diario. De este modo, decidió hacer un curso de sombrerería y tocados en la escuela Sevilla de Moda, y una vez que se especializó, comenzó a dar sus primeras puntadas en el estudio que hoy comparte con su madre, quien se dedica a la pintura y la escultura. ¡No cabe duda de que el arte lo lleva en los genes!
Pero ahí no queda eso. Unas manos privilegiadas dan para mucho y a Maite le llueven los encargos. ¿Los últimos? Flores de flamenca, el rediseño de un bolso o el fajín y los puños de un vestido de novia. Os recomiendo que paséis por su BLOG o su página de FACEBOOK. En ambos espacios online podéis seguir todo su trabajo, detalles y rincones que le inspiran, ideas para decorar... y alguna sorpresa que me ha contado para las próximas semanas.
¡Enhorabuena Maite!
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